Vamos a por la tercera parte de este post sobre los profesionales que tratan los cálculos renales. En el primer post vimos que el urólogo es el especialista que en la práctica trata los cálculos renales. Y en el segundo vimos que no puede hacer este trabajo sin el apoyo de otros médicos especialistas como el de urgencias, el nefrólogo, el radiólogo o el anestesista.
En este tercer y último post hablaremos de otros profesionales de la salud que son igualmente importantes para el diagnóstico, tratamiento y prevención de los cálculos renales, pero cada uno con una función diferente. Ellos son el médico de atención primaria, el enfermero, el nutricionista, el bioquímico y el microbiólogo. ¡Sigue leyendo para aprender más!
El Médico de Atención Primaria
El médico de atención primaria (también médico de cabecera, general o de familia) es el primer nivel de atención en nuestro Sistema Nacional de Salud, y es quien se encarga de resolver el 90% de las consultas de los pacientes. En España estos médicos suelen estar en los ambulatorios, representan el 42% de todos los médicos de nuestro país, y atienden unos 200 millones de consultas anuales.
Este es el médico que a menudo se encarga de hacer el seguimiento a los pacientes una vez se les ha extraído el cálculo renal. No sólo se preocupa de prevenir futuros cálculos renales dando continuidad al tratamiento iniciado por el urólogo o nefrólogo, sino del paciente como un todo. Así pues, si el paciente además de haber tenido un cálculo renal tiene obesidad, diabetes, hipertensión y el colesterol alto, el médico de cabecera le ayudará a bajar de peso, a controlar el azúcar, la presión arterial y el colesterol, y también a evitar la formación de nuevos cálculos. Es el profesional de confianza del paciente.
El Enfermero
El enfermero es un profesional de la salud que atiende y cuida a los enfermos, y asiste a los médicos en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades. Los enfermeros también tienen especialidades y en España es posible encontrar enfermeros especializados en cuidados médico-quirúrgicos, que asisten a los médicos cirujanos y anestesistas en el quirófano antes y durante una intervención quirúrgica. Los enfermeros que trabajan asistiendo a los servicios de urología se suelen llamar enfermeros urológicos y forman parte de la Asociación Española de Enfermería Urológica (www.enfuro.es).
En el caso de los cálculos renales, los enfermeros urológicos tienen un papel importante durante la intervención asistiendo al urólogo y al anestesista. Entre otras cosas, se encargan de preparar el quirófano, de preparar todos los equipos de monitorización, de preparar todos los instrumentos quirúrgicos, de preparar al paciente, y de pasar los instrumentos al urólogo cuando los necesita para que lleve a cabo la cirugía.
Una vez el paciente está en la planta del Hospital recuperándose de la intervención, el enfermero también se encarga de su cuidado hasta que reciba el alta médica.
El Nutricionista clínico
El nutricionista clínico es un profesional de la salud que es experto en alimentación. Y se encarga de diagnosticar las carencias nutricionales del paciente en función de su enfermedad, así como como de pautar un tratamiento nutricional.
Los cálculos renales son una enfermedad metabólica que está estrechamente asociada a la alimentación y el estilo de vida. Por tanto, si se corrigen algunos hábitos dietéticos con la ayuda de un nutricionista clínico experto en litiasis renal, se puede reducir en gran medida el riesgo de formar nuevos cálculos renales.
Las funciones del nutricionista son identificar los hábitos dietéticos del paciente (e.g. sus carencias, excesos, intolerancias y alergias nutricionales), desarrollar planes de alimentación adaptados a las necesidades de cada paciente y al tipo de cálculo renal que esté formando, y educar sobre la importancia de la nutrición en la prevención de cálculos renales.
Si quieres prevenir nuevos cálculos renales, plantéate seriamente contratar a un nutricionista clínico. Te cambiará la vida. Y si no conoces a ninguno que sea experto en cálculos renales, no dudes en contactarnos. Estaremos encantados de recomendarte a los mejores.
El Bioquímico clínico
El bioquímico clínico es un profesional de la salud que usa diferentes métodos en el laboratorio para analizar muestras de pacientes que permiten diagnosticar, tratar o prevenir enfermedades.
En el caso de los cálculos renales, los bioquímicos clínicos se encargan de analizar las muestras de orina de 24h y de sangre que solicitan los urólogos para determinar cuál es el desorden metabólico del paciente y cuál es la causa de formación de sus cálculos renales. Conociendo la causa, los urólogos pueden luego pautar un tratamiento específico.
El análisis de orina y de sangre se conoce como análisis metabólico. Y a pesar de que se ha demostrado que es muy útil para diagnosticar, tratar y prevenir los cálculos renales, y de que está recomendado por las Guías Clínicas de Urolitiasis de la Asociación Europea de Urología, son todavía muy pocos los urólogos que lo solicitan. Recuerda siempre pedirle a tu urólogo que solicite un análisis metabólico al laboratorio. Si te dice que no es necesario, insístele. Y si tienes problemas para interpretar los resultados, no dudes en contactarnos.
El bioquímico clínico a veces también realiza otros análisis más detallados a petición del urólogo; como el análisis de cristales en la orina (cristaluria) o el análisis de la composición del cálculo. Ambos análisis son importantes, especialmente el de la composición del cálculo. De nuevo, si tienes un cálculo renal que has expulsado espontáneamente o que te han extraído en una intervención quirúrgica, asegúrate de pedirle a tu urólogo que lo envíe a analizar al laboratorio para estudiar su composición.
El Microbiólogo clínico
El microbiólogo clínico es un profesional sanitario que estudia y analiza los microorganismos (microbios) del paciente y su relación con la enfermedad que padece. Habitualmente se centran en enfermedades infecciosas como las causadas por virus (COVID-19), bacterias (E. coli) u hongos (Candidiasis).
En el caso de los cálculos renales, hasta ahora los microbiólogos clínicos no han tenido un papel muy importante. Pero los recientes descubrimientos de la microbiota intestinal y urinaria, y su impacto en la formación de cálculos renales, nos hacen pensar que los microbiólogos cada vez tendrán más peso para diagnosticar, tratar y prevenir los cálculos renales.
Por ejemplo, hoy sabemos que la presencia de determinadas bacterias (O. formigenes) en el intestino puede ayudar a degradar el oxalato reduciendo su absorción intestinal y por tanto su excreción urinaria. Si aumentamos la presencia de estas bacterias es posible que podamos reducir el riesgo de formar cálculos de oxalato cálcico. Es un campo todavía nuevo, pero disponer de un análisis de nuestra microbiota intestinal y urinaria nos podría decir mucho sobre la causa de la formación de nuestros cálculos renales.
En conclusión
Como hemos visto, además del urólogo hay otros profesionales sanitarios que tienen un papel importante en el tratamiento de los cálculos renales. En el pasado post aprendimos sobre el médico de urgencias, el nefrólogo, el radiólogo y el anestesista. Y en este hemos aprendido la importancia que tiene el médico de cabecera, el enfermero, el nutricionista, el bioquímico y el microbiólogo.
¡Tratar tus cálculos renales no es tarea fácil! Requiere de un trabajo multidisciplinar y la participación de muchos profesionales. Es por eso por lo que es tan difícil prevenir los cálculos renales. Si realmente quieres prevenirlos, asegúrate de entender de qué se encarga cada profesional y de pedir a tu urólogo que te derive a cada uno de ellos para que entre todos podáis conseguirlo.
Recuerda que tú eres el miembro del equipo más importante. Y que toda prevención empieza por ti mismo. Fórmate, aprende, y luego asegúrate de cumplir con las recomendaciones de los profesionales sanitarios. Y por supuesto, si lo necesitas, no dudes en contactarnos.