Según el tipo, el tamaño y la ubicación de la piedra es muy probable que el doctor te de algunas recomendaciones para ayudarte a expulsar el cálculo renal de manera espontánea, es decir naturalmente sin intervención quirúrgica.
Esperar a que el cálculo renal se expulse sin intervención es seguro, siempre y cuando pueda tolerar el dolor, no presente señales de infección y el cálculo sea razonablemente pequeño, lo suficiente para expulsarse espontáneamente.
Para ayudar a expulsar este cálculo el médico le podrá recomendar varios remedios:
- Beber al menos 2 litros al día puede ayudarte a limpiar el aparato urinario. Sabrás que hayas bebido suficiente agua cuando tu orina es casi transparente.
- La expulsión de un cálculo pequeño puede provocar un dolor de intensidad variable (de leve a severo) y malestar; de modo que es posible que el médico recomiende analgésicos como ibuprofeno, paracetamol, naproxeno sódico o analgésicos opioides. Es posible que también necesite antieméticos.
- El médico puede recomendar también «alfabloqueante», un medicamento que relaja los músculos del uréter y te ayuda a expulsar el cálculo renal más rápido y con menos dolor.
- También puede ser útil tomar un complemento alimenticio, como Lit-Control pH Balance, con inhibidores de la cristalización que permiten impedir que el cálculo siga creciendo.
La mayoría de los cálculos renales de tamaño pequeño no requieren cirugía o intervención invasiva y se expulsan antes de cuatro a seis semanas. Después de este tiempo, es posible que sea necesario volver a evaluar su tratamiento y determinar si se puede seguir esperando una expulsión espontanea o si se debe considerar una intervención.