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Los cálculos renales, también conocidos como litiasis urinaria, son masas solidas que se forman en el interior del riñón a partir de sustancias presentes en la orina en cantidades anormalmente altas. Existen varios tipos de cálculos renales que se reparten en diferentes categorías según sus condiciones de formación y composición. La gran variedad de tamaño de las piedras hace que se puedan quedar en el riñón, viajar en el tracto urinario y ser expulsadas espontáneamente o al contrario bloquear el flujo de orina y causar un dolor muy intenso. La litiasis renal es una enfermedad crónica que conlleva alta recurrencia de formación de piedras, por eso es importante diagnosticar bien tu calculo para prevenir la recurrencia de manera adaptada al tipo de piedra.
¿Qué son?
Los cálculos de cistina son causados por un raro trastorno llamado "cistinuria". El trastorno causa que una sustancia natural llamada "cistina" se excreta en la orina. Cuando hay demasiada cistina en la orina, se pueden formar cálculos renales. Estas piedras pueden quedar atrapadas en los riñones, la vejiga o en cualquier parte del tracto urinario. La mayoría de las personas con cistinuria tienen cálculos altamente recurrentes. Es una enfermedad crónica que se puede controlar, pero no curar.
¿Cuáles son las causas? (1)
La cistinuria es un trastorno hereditario que se transmite de padres a hijos a través de un defecto en un gen específico. Para tener cistinuria, una persona debe heredar el gen de ambos padres.
Aproximadamente 1 de cada 7,000 personas en todo el mundo tiene cistinuria. Según un estudio reciente, la mayoría de las personas con cistinuria obtienen sus primeros cálculos en los veinte o treinta años, con un 30-40% de las personas que desarrollan cálculos de cistina en la adolescencia. Pero algunos adultos tienen su primer cálculo de cistina después de los 40 años. Los niños también pueden obtener cálculos de cistina. De hecho, según algunas investigaciones, el 8-10% de los cálculos renales en los niños son cálculos de cistina.
¿Cómo evitarlos?
Se recomienda realizar un tratamiento a fin de evitar la formación de piedras. En adultos y niños, esto significa beber más agua, reducir la sal y comer menos carne. Si estas recomendaciones no son suficientes, es posible que también necesite tomar un medicamento especial para ayudar a evitar que se formen cálculos.
1. Ingerir la cantidad suficiente de liquido
Beber mucha agua disminuirá la capacidad de la cistina de formar cálculos en la orina ya que permite diluir las sustancias que pueden cristalizar y formar nuevas piedras. Veremos que la cantidad de agua ingerida es suficiente cuando el color de nuestra orina sea casi transparente.
2. Observa una dieta equilibrada (2)
En un pH urinario alto (orina alcalina) es más difícil la formación de cálculos de cistina. Comer más frutas y verduras puede hacer que la orina sea más alcalina, y al contrario, comer carne produce que la orina sea más ácida, lo que puede aumentar el riesgo de formación de cálculos de cistina. Esto incluye pescado, mariscos, aves, cerdo, cordero y carne de caza.
3. Tratamiento farmacológico
La principal opción terapéutica para evitar la cristalización de la cistina es mantener el pH de la orina superior a 7.5 para mejorar la solubilidad de cisteína y asegurar una hidratación adecuada con un mínimo de 3.5 L / día en adultos (3). Cuando la orina es muy ácida hay que utilizar sustanciar alcalinizantes para que suba el pH de esta. Para ello, el médico te puede recomendar productos a base de citrato como Lit-Control pH Up.
Ciertos medicamentos pueden ayudar también a disminuir la cantidad de cistina en la orina. Puedes preguntar a tu médico cuales son estas diferentes opciones y te ayudará a encontrar el medicamento adecuado para ti.
Referencias:
(1) https://www.kidney.org/atoz/content/what-are-cystine-stones
(2) Preventing Kidney stones, Urology Care Foundation.
(3) Turk C. EAU Guidelines on Urolithiasis, European Association of Urology 2019.
